Si algo nos hace ilusión es que nuestros clientes corporativos piensen en nosotros para desayunos o comidas en casa de sus directivos. Es un premio por hacer nuestro trabajo cada día con nuestra mayor ilusión y entusiasmo. Somos un equipo al que le gusta servir y que confía en la tecnología para hacer más eficientes los procesos.
Un desayuno en casa de un directivo es la guinda del pastel y aquí los detalles, el mimo y la máxima atención se eleva a la enésima potencia porque estás entrando en su casa.
Al entrar en casa de alguien todo cuenta, desde el primer saludo hasta el trato y forma de hablar, hay que ser milimétrico y medir y realizar las acciones con mucha cintura y empatía.
El pasado domingo por la noche, la secretaria de un importantísimo directivo contrató desde la web un desayuno completo para servir a las 8:00. Un reto por la hora y por la importancia pero que gracias al cuidado que tenemos a la hora de seleccionar los caterings que forman parte de Fudeat salió a la perfección.
El desayuno constaba de un desayuno completo formado por fruta fresca y de temporada, yogur casero con arándanos, pulguitas de jamón ibérico con ralladura de tomate, aceite de oliva virgen extra y sal, pulguitas de pavo con queso brie, sandwichitos variados, mini bollería (croissants y napolitanas de chocolate). De beber café, leche, agua caliente y un set de infusiones a la altura de cualquier tea party del siglo XVIII.
Todo el desayuno estuvo presentado en vajilla de loza, cristalería y distintas alturas para romper con la monotonía del espacio.
Pedidos así nos llenan de orgullo y nos permiten seguir trabajando con la misma ilusión del primer día. Y a ti.. ¿Con qué podemos ayudarte?